Es una pregunta que todos nos hemos hecho, independientemente de si tenemos a un familiar con éste problema. Para responderla, es importante destacar qué es lo primero que la mayoría de las personas piensan cuando ve a un alcohólico? Que seguramente se trata de alguien parrandero, fiestero, irresponsable, vago… alguien que no tiene ningún respeto por sí mismo y que prefiere intoxicarse con cervezas y cócteles antes que convivir con su familia o amigos.
Bueno, este es solo uno de los tantos prejuicios que rodean al alcoholismo y que evitan que las personas que padecen una adicción busquen ayuda y recuperen sus vidas. Por eso, hoy vamos a explicar realmente si el alcoholismo es una enfermedad o un vicio, la manera de abordarlo y cómo.
¡Toma nota! Esta información es muy útil para ayudar a un amigo, pariente o conocido en apuros.
Alcoholismo: ¿enfermedad, trastorno o vicio?
Para entender exactamente si el alcoholismo es una enfermedad, un trastorno o un vicio, debemos entender cada uno de estos términos.
Vicio es una palabra que está asociada con la falta de voluntad, el hábito de actuar mal, una moral descuidada y demás connotaciones negativas. Por otra parte, el trastorno se entiende como un desorden que puede alterar el funcionamiento normal de una persona y que puede estar provocado por situaciones del mundo real, pero también por elementos químicos en el medio ambiente, los alimentos, las bebidas, entre otros. Finalmente, la OMS define enfermedad como una “alteración del estado fisiológico en una o varias partes del cuerpo, por causas generalmente conocidas, que manifiestan síntomas y signos específicos, y cuya evolución es más o menos previsible”
Así, el TRASTORNO por uso de alcohol es una ENFERMEDAD con graves consecuencias tanto a nivel físico, psicológico y social. Además, esta terminología nos hace mucho sentido si pensamos que el alcoholismo presenta síntomas y requiere de un diagnóstico y tratamiento por parte de un profesional de la salud.
Y cómo saber si una persona bebe dentro de los parámetros seguros o está cruzando la línea y se encamina a caer en una adicción?
Si una persona bebe alcohol con moderación, únicamente en situaciones sociales esporádicas y puede pasar largos periodos de tiempo sin consumirlo, entonces podemos decir que consume de manera responsable. Por otro lado, si una persona bebe en exceso, pero es capaz de seguir con su vida sin afectar sus relaciones con colegas, amigos o familiares, y sin descuidar sus responsabilidades diarias, entonces hablamos de un alcohólico funcional que seguramente ya está experimentando algunos síntomas físicos y psicológicos y que puede caer muy fácilmente en una adicción.
Por último, decimos que una persona padece un trastorno grave de alcoholismo cuando el alcohol se convierte en la única cosa importante en su vida. Estas personas suelen beber todos los días, en cualquier momento, e incluso prefieren beber que convivir con la familia o acudir al trabajo o a la escuela. Suelen pasar largos periodos de tiempo fuera de casa y tienden a experimentar problemas económicos y con la ley. A este punto, la ingesta de alcohol se ha vuelto una necesidad, pues el cuerpo ha creado una dependencia a la sustancia, por lo que limpiar el cuerpo requiere de una desintoxicación supervisada en un centro de rehabilitación para alcohólicos.
¿Y cómo ayudar a un alcohólico funcional o con trastorno grave?
Puedes intentar conversar con él, vigilarlo, establecer límites, pero al final, si no se trata la raíz del problema, esta se convertirá en una situación recurrente que merme la calidad de vida de todos los integrantes de la familia.
Por eso, lo recomendable siempre es pedir apoyo en un centro de rehabilitación como Clínica Nuevo Ser donde, además de atender su problema de la adicción, los pacientes deben acudir a terapias y grupos de apoyo para encontrar maneras saludables de sobrellevar las dificultades de la vida.
Los tratamientos para la depresión, el estrés, la ansiedad, la codependencia o el agotamiento crónico son el camino ideal para lograr una recuperación definitiva a largo plazo.
Si estás listo para dar el primer paso, por ti o por un ser querido, llámanos. Estamos disponibles las 24 horas del día para atender con total discreción y profesionalismo. Salir de la adicción es posible, solo que se requiere de manos expertas que sepan guiar al paciente en cada paso para librarse de ese problema y no volver a caer en él. Acércate a nosotros, cuéntanos la situación, y ten por seguro que ayudaremos a superar esto.